Capitulo 118

La maldita puerta no abría, de nuevo con el mismo problema. Pedro empujo y logro abrirla pero había que arreglarla de nuevo o directamente comprar otra, hace unos meses esto ya me había pasado.

Pau:Lo primero que hay que hacer es cambiar la puerta -dije mirándola- en cualquier momento nos quedamos encerrados.

Pedro:Es un problema de la cerradura, no es necesario comprar otra. Mira -dije indicándole que se acerque- ves? Esta perfecta, la cerradura también lo esta.

Pau:¿Entonces? ¿tengo que ir al gimnasio porque no tengo fuerza? -reí.

Pedro:No Pau, a mi me paso varias veces seguramente es por el calor, no le veo nada raro a la cerradura.

Pau:¿Por el calor? ¿vos decís? No tenes nada de cerrajero.

Pedro:Hace lo que quieras, pero ese es el problema -dijo cerrando la puerta- no nos vamos a quedar encerrados, a lo sumo que sea nuestra culpa y uno cierre y esconda la llave -dijo posando sus manos en mi cintura mientras me iba acercando hacia él- ¿no?

Pau:Mm pero no va a ser falta, no creo que ninguno de los dos quiera escaparse -dije besándolo- amor -me aleje un poquito de él- tengo que ordenar unas cosas que me quedaron pendientes, ya vuelvo.

Agarre una toalla que había olvidado en el medio de la cocina y la lleve al baño lugar al que pertenece, agarre esa poca ropa que había dejado en el baño y la puse en el tacho donde dejaba la ropa sucia. Luego fui a mi habitación para doblar un par de cosas que me había probado ya que no estaba muy decidida de lo que iba a ponerme y como me había quedado sin tiempo no pude volver a ponerla en su lugar y después salí de aquella habitación para ir con Pedro.

Pau:Gordo, tenia pensado en cocinar algo simple, no tengo muchas ganas de quedarme demasiado tiempo cocinando ¿que decís?

Pedro:No tengo hambre amor, no voy a comer, hace lo que quieras.

Pau:Tengo pan, jamón y queso. ¿No queres hacerte un sándwich al menos? No podes estar sin comer.

Pedro:Pero gorda, son las siete y media. ¿A esta hora queres comer?

Pau:No se, tipo ocho.

Pedro:Es muy temprano y no, no tengo hambre de verdad. Seguramente me levanto a la madrugada si tengo hambre y como algo, pero ahora no tengo ganas de comer.

Pau:Esta bien, entonces no comemos.

Pedro:No, si queres comer hacete algo, no te quedes sin comer por mi culpa.

Pau:No -dije sentándome en sus piernas ya que estaba sentado en el sillón- hace mucho que no tenemos un tiempito para nosotros -dije “acomodando” el cuello de su camisa- ¿no? -me levante rápido y estire mi mano- veni -hice que se levante y me siga a la habitación para luego cerrar la puerta, sentí su respiración en mi hombro y sus manos en mi cintura que luego pasaron a mi panza, gire y muy pegado a mi boca susurro un te amo que termino en un beso.

Comenzó a acariciar mi espalda por debajo de la remera a la vez que me acercaba mas a él y sus besos pasaron a mi cuello, mientras yo con mis manos recorría su camisa en busca de los botones que en poco tiempo logre desabrochar para poder sacársela.

Él se deshizo de mi remera lo mas rápido que pudo e hizo que me suba arriba de él para dirigirnos a la cama que estaba muy cerca de nosotros. Así nos deshicimos de las pocas prendas que nos quedaban y terminamos haciendo el amor después de un tiempo bastante largo y de alguna forma tomándolo como una “reconciliación” después de todo lo que había pasado.

Me encontraba apoyada en su pecho, con una sabana tapándonos, una de nuestras manos juntas, con nuestros dedos entrelazados y su otra mano jugando con mi pelo.

CONTINUARA

No se olviden de comentar así subo mas seguido ;)
Sigan la nove al costado del blog. Comenten acá o en mi twitter @Love_PauChaves.